Señalan que la etapa de mayor vulnerabilidad para contraer ese virus es la juventud
Se pedirá autorización de los padres de familia o tutores
Se pedirá autorización de los padres de familia o tutores
Los menores de edad que se encuentran en centros de internamiento del Sistema Penitenciario del Distrito Federal serán los primeros en recibir las vacunas que lleguen a la ciudad para prevenir el contagio del virus de la influenza A(H1N1).
En entrevista, la directora de Tratamiento para Menores del gobierno capitalino, Raquel Olvera, informó lo anterior y dijo que se llegó a un acuerdo con la Secretaría de Salud local para que, además del personal médico, sean menores en reclusión la prioridad en la aplicación de la vacuna.
Explicó que la etapa de mayor vulnerabilidad para contraer ese virus es la juventud, por lo que se estudia con el secretario de Salud capitalino, Armando Ahued, la mecánica para aplicar las primeras vacunas, con prioridad para hacerlo en los seis centros de internamiento y tratamiento para menores en la ciudad.
"Hemos tenido pláticas constantes, nos dijeron que somos prioridad y que tendremos que atender de forma inmediata sus indicaciones una vez que llegue la vacuna, aunque aún no nos han dado ninguna fecha", señaló.
Adelantó que la vacuna será obligatoria para la población de aproximadamente 800 menores que se encuentran en internamiento, previa autorización de sus padres de familia o tutores.
"Afortunadamente son muy conscientes los padres cuando se les lleva a que firmen el documento de autorización, ya que se les explican las razones y los riesgos, nosotros hicimos esta campaña con la vacuna básica en el pasado y todos han aceptado, no ha habido ningún problema", indicó.
Agregó que en el caso de los dos mil 800 jóvenes que se encuentran bajo tratamiento de readaptación pero sin estar recluidos la aplicación de la vacuna será voluntaria.
La funcionaria comentó que en los últimos meses de 2009 se aplicarán medidas de prevención más rigurosas en los distintos centros para menores, toda vez que de acuerdo con las advertencias de las autoridades sanitarias se prevé que el riesgo de contagio sea mayor durante el invierno.
Adelantó que iniciará un programa con más rigidez por la época del año y se están tomando medidas preventivas como la adquisición de cobijas y chamarras para los jóvenes, entre otras cosas elementales, afirmó.
Explicó que lo anterior se sumará a las medidas que se tomaron desde abril, cuando se originó el primer brote del virus, como el constante lavado y sanitización de las instalaciones, los chequeos médicos a los menores y las pruebas rápidas de detección del virus, entre otros.
Raquel Olvera no descartó una eventual suspensión de la visita familiar en los centros de tratamiento (antes tutelares para menores) en caso de que se presentara una situación delicada.
"Según la gravedad serán las acciones que se tengan que tomar, pero si como la vez pasada se tienen que suspender las visitas ya hubo muy buen entendimiento tanto de los padres como de los adolescentes, no tuvimos ningún problema", subrayó.
La responsable de los reclusorios para menores de la ciudad destacó los buenos resultados que arrojaron las medidas de contingencia tomadas desde el primer brote de este virus, ya que hasta la fecha no se ha registrado un solo contagio en los seis centros de internamiento.
No obstante, reiteró que es importante "no relajar" el trabajo realizado, sobre todo por la vulnerabilidad que presentan los jóvenes a contraer el virus, según lo informado por las autoridades médicas.
La funcionaria dijo que aun no hay una fecha precisa para la aplicación de las vacunas contra el virus de la influenza A(H1N1), toda vez que éstas aún no han llegado al país, pero enfatizó que el objetivo es que puedan aplicarse antes de la temporada de invierno. México, D.F.
En entrevista, la directora de Tratamiento para Menores del gobierno capitalino, Raquel Olvera, informó lo anterior y dijo que se llegó a un acuerdo con la Secretaría de Salud local para que, además del personal médico, sean menores en reclusión la prioridad en la aplicación de la vacuna.
Explicó que la etapa de mayor vulnerabilidad para contraer ese virus es la juventud, por lo que se estudia con el secretario de Salud capitalino, Armando Ahued, la mecánica para aplicar las primeras vacunas, con prioridad para hacerlo en los seis centros de internamiento y tratamiento para menores en la ciudad.
"Hemos tenido pláticas constantes, nos dijeron que somos prioridad y que tendremos que atender de forma inmediata sus indicaciones una vez que llegue la vacuna, aunque aún no nos han dado ninguna fecha", señaló.
Adelantó que la vacuna será obligatoria para la población de aproximadamente 800 menores que se encuentran en internamiento, previa autorización de sus padres de familia o tutores.
"Afortunadamente son muy conscientes los padres cuando se les lleva a que firmen el documento de autorización, ya que se les explican las razones y los riesgos, nosotros hicimos esta campaña con la vacuna básica en el pasado y todos han aceptado, no ha habido ningún problema", indicó.
Agregó que en el caso de los dos mil 800 jóvenes que se encuentran bajo tratamiento de readaptación pero sin estar recluidos la aplicación de la vacuna será voluntaria.
La funcionaria comentó que en los últimos meses de 2009 se aplicarán medidas de prevención más rigurosas en los distintos centros para menores, toda vez que de acuerdo con las advertencias de las autoridades sanitarias se prevé que el riesgo de contagio sea mayor durante el invierno.
Adelantó que iniciará un programa con más rigidez por la época del año y se están tomando medidas preventivas como la adquisición de cobijas y chamarras para los jóvenes, entre otras cosas elementales, afirmó.
Explicó que lo anterior se sumará a las medidas que se tomaron desde abril, cuando se originó el primer brote del virus, como el constante lavado y sanitización de las instalaciones, los chequeos médicos a los menores y las pruebas rápidas de detección del virus, entre otros.
Raquel Olvera no descartó una eventual suspensión de la visita familiar en los centros de tratamiento (antes tutelares para menores) en caso de que se presentara una situación delicada.
"Según la gravedad serán las acciones que se tengan que tomar, pero si como la vez pasada se tienen que suspender las visitas ya hubo muy buen entendimiento tanto de los padres como de los adolescentes, no tuvimos ningún problema", subrayó.
La responsable de los reclusorios para menores de la ciudad destacó los buenos resultados que arrojaron las medidas de contingencia tomadas desde el primer brote de este virus, ya que hasta la fecha no se ha registrado un solo contagio en los seis centros de internamiento.
No obstante, reiteró que es importante "no relajar" el trabajo realizado, sobre todo por la vulnerabilidad que presentan los jóvenes a contraer el virus, según lo informado por las autoridades médicas.
La funcionaria dijo que aun no hay una fecha precisa para la aplicación de las vacunas contra el virus de la influenza A(H1N1), toda vez que éstas aún no han llegado al país, pero enfatizó que el objetivo es que puedan aplicarse antes de la temporada de invierno. México, D.F.
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