El Centro de Control Epidemiológico y el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos dieron a conocer una nueva guía para que los pequeños negocios y empresas se preparen y enfrenten el rebrote de la influenza A H1N1.
Con estas medidas se pretende mantener la operación, reducir el número de contagios y que el impacto sobre la economía sea menor al de la primavera pasada, como ocurrió en México, EU y Canadá.
“Al enfrentar la posibilidad de una mayor epidemia de influenza A H1N1, es difícil predecir cómo podría cambiar el virus. Sin embargo, sabemos que el país está preparado para responder apropiadamente”, indicó Janet Napolitano, secretaria del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos.
Puntos críticos
La guía indica que los empleadores deben identificar un coordinador, ubicar a los trabajadores que sean sumamente esenciales, señalar puntos críticos, y funciones clave de los negocios, además de determinar las políticas de ausencia, trabajo a distancia y compensaciones para los empleados.
Adicionalmente, señala, los pequeños empresarios deberán de contar con programas de continuidad de sus negocios, así como establecer canales de comunicación de emergencia incluyendo respaldos de contactos, canales de comunicación con proveedores y clientes, y rastreo para comunicarse entre empleadores y empleados.
Los empleadores, agrega, deben establecer políticas que promuevan que los trabajadores permanezcan en sus hogares en caso de enfermarse, desarrollar políticas de trabajo a distancia, proporcionar recursos que permitan la higiene personal dentro del lugar de trabajo, proporcionar materiales de guía, entrenamiento y educación.
Además, deberán explicar a sus empleados sanos que en caso de que un familiar esté enfermo y tenga quien lo cuide, ellos pueden ir a trabajar, también deberán promover entre los empleados que se vacunen contra la influenza estacional, y después contra la A H1N1, y evitar contacto social y mantener la higiene permanente, especialmente de manos.
“La severidad que pueda tener la enfermedad de la influenza A H1N1, incluyendo hospitalizaciones y muertes, o la cantidad de enfermos que puedan haber producto de la influenza estacional durante la temporada 2009-2010 no puede ser proyectada con un alto grado de certeza”, detalló Napolitano.
Se espera que hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS) dé a conocer un nuevo corte de la situación que prevalece en el mundo como resultado del aumento de casos de influenza A H1N1 en el hemisferio norte, entre ellos México.
Con estas medidas se pretende mantener la operación, reducir el número de contagios y que el impacto sobre la economía sea menor al de la primavera pasada, como ocurrió en México, EU y Canadá.
“Al enfrentar la posibilidad de una mayor epidemia de influenza A H1N1, es difícil predecir cómo podría cambiar el virus. Sin embargo, sabemos que el país está preparado para responder apropiadamente”, indicó Janet Napolitano, secretaria del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos.
Puntos críticos
La guía indica que los empleadores deben identificar un coordinador, ubicar a los trabajadores que sean sumamente esenciales, señalar puntos críticos, y funciones clave de los negocios, además de determinar las políticas de ausencia, trabajo a distancia y compensaciones para los empleados.
Adicionalmente, señala, los pequeños empresarios deberán de contar con programas de continuidad de sus negocios, así como establecer canales de comunicación de emergencia incluyendo respaldos de contactos, canales de comunicación con proveedores y clientes, y rastreo para comunicarse entre empleadores y empleados.
Los empleadores, agrega, deben establecer políticas que promuevan que los trabajadores permanezcan en sus hogares en caso de enfermarse, desarrollar políticas de trabajo a distancia, proporcionar recursos que permitan la higiene personal dentro del lugar de trabajo, proporcionar materiales de guía, entrenamiento y educación.
Además, deberán explicar a sus empleados sanos que en caso de que un familiar esté enfermo y tenga quien lo cuide, ellos pueden ir a trabajar, también deberán promover entre los empleados que se vacunen contra la influenza estacional, y después contra la A H1N1, y evitar contacto social y mantener la higiene permanente, especialmente de manos.
“La severidad que pueda tener la enfermedad de la influenza A H1N1, incluyendo hospitalizaciones y muertes, o la cantidad de enfermos que puedan haber producto de la influenza estacional durante la temporada 2009-2010 no puede ser proyectada con un alto grado de certeza”, detalló Napolitano.
Se espera que hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS) dé a conocer un nuevo corte de la situación que prevalece en el mundo como resultado del aumento de casos de influenza A H1N1 en el hemisferio norte, entre ellos México.
No hay comentarios:
Publicar un comentario